Saque ventaja con GAIN a la hora de vender un potro con nuestra guía especializada de nutrición para la venta de potros. Los primeros potrillos del año tienen una ventaja física, ya que están naturalmente más desarrollados que otros potrillos más jóvenes.
Los potros que nacen en mayo y junio aún son muy jóvenes, y dependen de la leche materna para obtener el mejor aporte nutricional a una edad tan temprana. Su sistema digestivo es aún muy inmaduro. Por tanto, el dueño tiene que tener cuidado al intentar complementar la dieta con un concentrado. La yegua empezará a producir menos lecha a los tres meses de lactancia, más o menos. Ese es un buen momento para empezar a darles una pequeña cantidad de pienso a estos potros.
Para controlar la ingesta, es aconsejable separar al potro de su madre. Si se trata de un potro muy joven, quizá convenga también separarlo de otros potros más mayores, para que no reciba una cantidad inadecuada de pienso hasta que su sistema digestivo se haya desarrollado lo suficiente como para consumirla.
Hay varios productos diseñados y formulados específicamente para potrillos jóvenes. Tienen una concentración muy alta de proteínas, vitaminas y minerales y, por tanto, la dosis tiene que ser baja. Los GAIN Foal Pellets contienen proteínas lácteas, lo que le facilita la digestión al potro. Si el potro tiene una curva de crecimiento normal, lo idea es dejarlo con la madre hasta que tenga unos 5 meses, siempre que haya margen suficiente hasta la venta.
La introducción gradual de un pienso concentrado ayudará a reducir el estrés del destete a cualquier edad. Una vez destetado el potro, es importante que su dieta incluya una buena fuente de lisina y treonina. Estos dos nutrientes son clave para un correcto crecimiento, pero no son los únicos que necesita el potro. Es esencial que cuente con un aporte suficiente vitaminas y minerales para que crezca bien y sano. Todos estos componentes tienen que estar equilibrados. Los piensos comerciales se formulan pensando en ese equilibrio.
Preparación de un potrillo para la venta
Se recomienda ampliamente un programa de preparación de 6 semanas.
Para preparar a un potrillo que coma bien y no tenga problemas de motricidad, puede usarse un producto estándar de la gama para sementales, como los piensos GAIN Young Stock o Stud. Si el potro exige un mayor desarrollo, el GAIN Prep ‘N’ Condition Mix es una opción útil con mayor aporte calórico. No obstante, si el potro presenta problemas de desarrollo de la estructura ósea o una curva de crecimiento anómala, será necesario un plan nutricional controlado, con un equilibrador concentrado como el GAIN StudCare 32.
Otoño es también la época del año en la que la hierba empieza a crecer menos y su calidad es más variable. Aunque lo ideal es que los potros estén en su entorno natural, pastando y haciendo ejercicio, será necesario meterlos en el establo durante la noche en esas últimas 4-6 semanas antes de la venta, y sacarlos todo el tiempo posible durante el día. Mientras esté en el establo, tenga en cuenta la calidad del forraje al que tendrá acceso el potro. Con un forraje con hojas de calidad superior, el potro no «echará barriga».
También es buena idea incluir en la dieta algo de alfalfa de alta calidad, ya que es rica en proteínas y en calcio biodisponible, pero también muy fácil de digerir. A medida que se acerque la fecha de la venta, intente mantener la calma y no presionar al potro, ya que puede provocarle una enfermedad ortopédica. Los compradores potenciales no esperan que un potro nacido en mayo o en junio tenga el mismo aspecto que uno nacido en febrero o en marzo. Lo importante es que lleguen al día de la venta sanos y en buen estado, no con un físico imponente.
Para conseguirlo, consulte a su veterinario y a su herrador. Hable también con un nutricionista que pueda ayudarle a pulir el programa de alimentación. Recuerde que, a la hora de alimentar a un potro joven, es imperativo seguir las directrices.